“Mensaje Recibido”

Que fue lo que nos paso, en donde el pequeño elfo se desvaneció, en qué punto la tierra se seco, esas lágrimas de nicotina ya no tienen el sabor de antes las palabras ya son vacías y el hedor maldito de la resonancia están presentes en mi mente…

El espíritu murió, los por siempre desaparecieron para dar paso al carrito nocturno convenenciero, el cual vende caricias, y no satisface nuestras necesidades.

Simplemente ya no encuentro el sabor a ti, esa esencia inocente, supongo que la vida nos trato mal, supongo que no vivíamos en la realidad, era nuestro mundo, el cual se fue acabando poco a poco, se agotaron los recursos, se terminó el cenicero, se rompió el vaso.

No quedan llamas en esta fogata “eterna” del amor…
Un día encontré un fosforo intentando revivir las sensaciones por las cuales dejaba el mundo atrás solo para estar contigo, pero la marea me ahogo, y termino por enviarme a otra costa, a ver espejos y a sentirme como yo solo lo sé hacer, me reencontré en esos siete espejos, camine sobre el asfalto, mire hacia la lluvia y no necesite nada más.

Ya es tarde para explicaciones, ya es tarde para sentirse mal, ya es muy tarde, pero la puerta sigue abierta, pero no me esperes que el café esté frio y el sofá vacio.